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Giovanna Moya Rossi de niña, en una bellísima fotografía de su padre, Rodrigo Moya. |
Sucedió en 1973. Yo tenía dieciocho años y ella catorce. La conocí por mi hermano Sergio, ya que la invitó a participar en su película
Qué tiempos aquellos de la que yo había escrito el guión. Se llamaba Giovanna y en aquel momento yo sólo sabía que era prima de Alejandra Moya (una joven muy guapa que también participaba en la cinta) y sobrina de la coreógrafa Colombia Moya (madre de Alejandra). Me enamoré perdidamente de Giovanna. Me fascinaba. Era delgada, blanca, de cabello oscuro, me parecía una preciosidad. Yo era muy tímido y apenas me atrevía a cruzar palabras con ella. Nunca me atreví a decirle cuánto me gustaba. En realidad aquello duró unos pocos meses, ya que al terminar la filmación no volví a verla y jamás se me ocurrió buscarla. El momento de mayor intimidad que recuerdo con ella fue una ocasión en que nos quedamos a solas por unos minutos en la combi de Sergio: ella en la parte delantera, yo atrás, una parte a la que no entraba mucha luz. Giovanna me miró y me dijo "pareces un fantasma". No sé por qué, pero aquello me encantó y a más de cuarenta años de distancia no lo olvido. Incluso usé esa frase en una canción que escribí, en una línea que dice "recuerdo oírte decir 'fantasma'". De hecho, le compuse una canción llamada "Dejaste abierta la puerta". Dos o tres años después, me enteré que se había matado en la carretera. Creo que iba con un novio y se volcaron en un coche. Cosas caprichosas de la vida: en los años ochenta entré a trabajar como redactor y reportero en la revista
Técnica Pesquera que dirigía el gran fotógrafo y editor Rodrigo Moya. Resultó que era el papá de Giovanna y que seguido recordaba a su hija accidentada. Jamás me atreví a decirle al buen Rodrigo (curiosamente siempre nos hablamos de "usted") que yo había estado enamorado fugazmente de su hija. La madre de Giovanna era una catedrática italiana de la Facultad de Filosofía y Letras: Annunziatta Rossi (si no me equivoco, hermana del filósofo Alejandro Rossi). Tenía padres y tíos ilustres la Giovannita. Hoy tendría cincuenta y seis años. Era tan bonita, aún la recuerdo con ternura.
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Giovanna, de túnica rosa (extremo derecho), en 1973, durante la filmación, en Las Estacas, Morelos, de ¡Qué tiempos aquellos! La acompañan, de izquierda a derecha, Daria, Alejandra Moya (de túnica amarilla), Sergio García y Tina French. |